¡dios te está observando!
"Cuando todavía estaba lejos, su padre lo vio y se conmovió profundamente" (Lucas 15:20).
A menudo he escuchado a la gente imaginar a Dios como distante y lejano, vigilando ansiosamente para ver que no se salgan de la línea. Estas personas visualizan a Dios como un supervisor listo y ansioso por castigar sus pecados y fallas.
Las Escrituras Eucarísticas de hoy revelan una imagen totalmente diferente de Dios. Sí, Él ciertamente nos está observando a cada uno de nosotros. Jesús revela que Dios Padre nos vigila como el padre del hijo pródigo vigiló a su hijo descarriado. La razón por la cual el padre vio al hijo "cuando todavía estaba lejos…" (Lc 15:20) fue porque lo buscaba constantemente, amorosa y vigilantemente. Del mismo modo, Dios se deleita absolutamente en colmarnos de misericordia (Miq 7:18) y espera con ansiedad el momento en que estemos listos para recibirla.
Se nos ordena "fijar nuestros ojos en Jesús" (Heb 3:1). Podemos hacer esto solo porque el Señor primero ha fijado Sus ojos en nosotros. El Antiguo Testamento revela que Dios "vela por" los justos y los irreprensibles (Sal 1:6; 34:21; 37:18). Jesús revela en el Nuevo Testamento que Dios vela incluso por los pecadores y por los que lo odian o lo ignoran (Lc 15:20; Mt 5:45).
Jesús "observó" a Pedro y Andrés antes de llamarlos a sus vocaciones (Mt 4:18). Él nos observa incluso cuando estamos "todavía muy lejos" de servirle. Él nos ve no por lo que somos, sino por lo que podemos ser en Él: reales, sacerdotales, santos y escogidos (1 Pe 2:9). A Dios le encanta mirarnos. Suplica: "Déjame verte... Eres hermoso" (Cant 2:14). "Venid a" Jesús. Eres "precioso a los ojos de Dios" (1 Pe 2:4). ¡Tú eres la niña de Sus ojos! (Sal 17:8)
Oración: Señor, que siempre ponga un brillo en Tus ojos.
Promesa: "Tu arrojarás en lo más profundo del mar todos nuestros pecados" (Miq 7:19).
Alabanza: Juanita recibió profundamente el amor de Dios. Llena de misericordia, perdonó a un miembro de su familia que la lastimaba continuamente.
Referencia: (Esta enseñanza fue presentada por un miembro del equipo editorial).
Rescripto: Según el Código de Derecho Canónico, se otorga el Nihil Obstat (no existe impedimento para publicar) a Un Pan, Un Cuerpo por el periodo 1 de febrero de 2025 al 31 de marzo de 2025. Otorgado el 7 de agosto de 2024. Reverendo Steve J. Angi, Canciller y Vicario general de la Arquidiócesis de Cincinnati
El Nihil Obstat establece que no existe impedimento para la publicación de un libro o folleto. No implica acuerdo con contenido, opiniones o afirmaciones expresadas en el mismo.