el que se hizo pecado (2 co 5:21)
“…Ya no hay necesidad de ofrecer por ellos ninguna oblación” (Hebreos 10:18).
Sacerdote tras sacerdote ministraron día tras día y ofrecieron “una y otra vez los mismos sacrificios que son totalmente ineficaces para quitar el pecado” (Heb 10:11). Innumerables sacerdotes pasaron siglos ofreciendo cientos de miles de animales para quitar el pecado. Al final de todo, no estaban más cerca de quitar los pecados que cuando comenzaron.
“Cristo, en cambio, después de haber ofrecido un único Sacrificio por los pecados, se sentó para siempre a la derecha del Padre” (Heb 10:12). “Y así, mediante una sola oblación, Él ha perfeccionado para siempre a los que santifica” (Heb 10:14). Jesús hizo lo que el mundo entero no pudo hacer. Así logró en el momento de su muerte lo que nunca se pudo haber hecho en todo el tiempo del mundo. Una gota de sangre de Jesús logró lo que nunca se hubiera podido lograr con ríos de sangre provenientes de animales sacrificados.
Por lo tanto, entreguemos totalmente nuestra vida a Jesús y aceptémoslo como nuestro Salvador del pecado (ver Ti 3:4-5). Demos gracias a Jesús siempre y para siempre por su muerte salvadora. Confesémonos frecuentemente y apliquemos la sangre de Jesús a nuestros pecados. Digámosle a un mundo pecador que Jesús es “la Víctima propiciatoria por nuestros pecados, y no solo por los nuestros, sino también por los del mundo entero” (1 Jn 2:2).
Oración: Padre, ¡me regocijo en “el Cordero de Dios que quita el pecado del mundo”! (Jn 1:29)
Promesa: “Y los que reciben la semilla en tierra buena, son los que escuchan la Palabra, la aceptan y dan fruto al treinta, al sesenta y al ciento por uno” (Mc 4:20).
Alabanza: Jesús curó a Ramón de un cáncer terminal del esófago.
Referencia:
Rescripto: Según el Código de Derecho Canónico, se otorga el Nihil Obstat (no existe impedimento para publicar) a Un Pan, Un Cuerpo por el periodo 1 de diciembre de 2024 al 31 de enero de 2025. Otorgado el 3 de julio de 2024. Reverendo Steve J. Angi, Canciller y Vicario general de la Arquidiócesis de Cincinnati, Ohio
El Nihil Obstat establece que no existe impedimento para la publicación de un libro o folleto. No implica acuerdo con contenido, opiniones o afirmaciones expresadas en el mismo.