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Miércoles, 10 de septiembre de 2014

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1 Corintios 7:25-31
Salmos 45:11-12, 14-17
Lucas 6:20-26

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Reflexiones Similares

los solteros

"¿No tienes mujer? No la busques" (1 Corintios 7:27).

Aquellos solteros elegidos para el Señor no cometen pecado si deciden casarse (1 Co 7:28). "Pero los que lo hagan, sufrirán tribulaciones en su carne que yo quisiera evitarles" (1 Co 7:28). Todos hemos sufrido tribulaciones; así que Pablo debió de estar refiriéndose a tribulaciones adicionales e innecesarias. Sin embargo, en ocasiones es necesario ser sometidos a pruebas. Evidentemente, Pablo no se refería a estas "buenas" tribulaciones o él no se habría esforzado en prevenirnos. En conclusión, en las Escrituras, el Señor nos indica que aquellos que deciden casarse a pesar de haber sido llamados a permanecer solteros van a ser sometidos a sufrimientos adicionales e innecesarios, los cuales hubieran podido evitar.

¿Está el Señor tratando de mostrarles a los solteros que esta es la forma más fácil y cómoda de vivir? No, el Señor está tratando de ayudar los solteros a disponer de la mayor libertad posible para dedicarse completamente a Él (1 Co 7:35). Un grupo dentro del Cuerpo de Cristo debe estar disponible en todo momento para realizar todo tipo de servicio para expandir el reino de Dios. Definitivamente, no deben estar atados a preocupaciones innecesarias. Esta libertad y disponibilidad excepcionales de los solteros dedicados al Señor no tiene nada que ver con comodidad y tranquilidad; por el contrario contribuye al crecimiento del Cuerpo de Cristo.

"Queda poco tiempo" (1 Co 7:29), y estos son tiempos difíciles (1 Co 7:26). Solteros, el Cuerpo de Cristo necesita este regalo ahora más que nunca. Sé un soltero para El Señor y su Reino.

Oración:  Padre, levanta un ejército poderoso de vírgenes.

Promesa:  "…los que disfrutan del mundo, como si no disfrutaran. Porque la apariencia de este mundo es pasajera" (1 Co 7:31).

Alabanza:  Aunque sus hermanas y hermanos le aconsejaban alejarse, Marta optó por preservar su matrimonio y oraba por su marido que bebía con mucha frecuencia. Dios contestó las oraciones de Marta y su esposo se convirtió.

Rescripto:  †Reverendísimo Joseph R. Binzer, Obispo auxiliar y Vicario general de la Arquidiócesis de Cincinnati, 23 de abril de 2014

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